La valoración de acciones
El precio de las acciones cotizadas tiene un comportamiento determinado, en gran medida, por las expectativas que manejan los inversores en relación a una serie de variables fundamentales. Cuanto mayor sea la diferencia entre la expectativa y el dato que efectivamente se produce el movimiento es más brusco en las cotizaciones, puesto que los inversores están realizando un posicionamiento sobre estas variables de valoración.
Los analistas publican valoraciones completas por descuento de flujos de caja y valoración por múltiplos, donde normalmente el inversor no puede tocar las variables de dicha valoración, con lo que queda en pocas manos el análisis de este ajuste entre consenso o expectativa y realidad. Los inversores que usan la valoración por múltiplos mediante filtrados según los diferentes ratios, realizan en menor medida estas valoraciones absolutas al no ser su principal objetivo puesto que se basan en valoraciones relativas no absolutas.
Por tanto, la reacción de las cotizaciones ante cambios en las expectativas o diferencias entre los resultados y sus estimaciones las marcan pocos agentes del mercado. De hecho la valoración por múltiplos tiene tendencia a arrastrar las acciones dentro de un mismo sector, provocando sobrevaloraciones absolutas cuando se produce la llamada expansión de múltiplos o infravaloraciones en caso contrario.
¿En qué modelo nos basamos?
Ampliamos inicialmente el concepto de valor intrínseco de Ben Graham o Warren Buffet al utilizar el crecimiento del beneficio a largo plazo y generar el iPEG1, posteriormente añadimos las variables del coste del capital del modelo de descuento de flujos de caja2 que nos permite obtener el modelo TheLogicValue©. En definitiva, acercamos los puntos de vista de la valoración por múltiplos basados en el price earnings ratio y el modelo de descuento de flujos de caja, con el eslabón intermedio del iPEG. Las limitaciones son las habituales al utilizar el beneficio como punto de partida, como son la detección de activos no operativos, manipulaciones del mismo o posibles fallidos en su balance que no están reflejados en la cuenta de resultados.3
En definitiva, acercamos los puntos de vista de la valoración por múltiplos basados en el price earnings ratio y el modelo de descuento de flujos de caja, con el eslabón intermedio del iPEG. Las limitaciones son las habituales al utilizar el beneficio como punto de partida, como son la detección de activos no operativos, manipulaciones del mismo o posibles fallidos en su balance que no están reflejados en la cuenta de resultados.
TheLogicValue: Un modelo más eficiente
Se hace fundamental, para mejorar la eficiencia de los mercados financieros y por tanto para la reducción de las burbujas financieras, que exista una herramienta ágil y precisa que combine los métodos más usados en los mercados y que esté al alcance de un mayor número de inversores.
El uso del modelo para valorar empresas cotizadas o índices bursátiles y encontrar divergencias entre las expectativas implícitas en la cotización de las seis variables relevantes y lo que opina el consenso de mercado es totalmente novedosa.
Además, evitamos el problema que genera el modelo de descuento de flujos de caja al introducir tasas de crecimiento negativas o muy altas, que no obtienen precios objetivos lógicos. Esto se pone de manifiesto en el siguiente gráfico donde se reflejan los dos modelos.
1iPEG (Implicit Price Earnings Growth): Consiste en el número de años que recuperamos la inversión con los beneficios al modificarlos anualmente por la tasa de crecimiento anual estimada a largo plazo para dichos beneficios de la empresa analizada. Es decir con el P/E trailing o forward obtenemos el número de años que tardamos en recuperar con el beneficio constante lo que nos ha costado la acción. Nosotros lo corregimos para saber cuántos años tardaríamos si tuviéramos un determinado crecimiento positivo o negativo en los beneficios.
2Modelo de descuento de flujos de caja: determina el valor en el momento actual de los flujos netos de caja futuros generados por la compañía descontándolos a una tasa que refleja el coste de capital aportado.